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Tzu Chi brinda esperanza tras los incendios forestales en Maui

Escrito por Gabriela Barzallo

Publicación #20

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Un paisaje desolado y desgarrador en Maui tras el incendio forestal. Foto/Jaime Puerta

“Sentía una quemazón intensa en la mano. Me encontraba en el suelo, pero pensar en mi esposa, mis hijos y mis nietos, me dió fuerza para seguir corriendo, así que me lancé hacia el mar”, Joseph Texeira, un jubilado residente de Lahaina, Maui, HI, recuerda los acontecimientos ocurridos el 27 de agosto de 2023. Joseph no podía detenerse ni descansar, de lo contrario, habría sido presa del fuego. Continuó su carrera hacia el rompeolas, donde no era posible lanzarse directamente al mar debido al riesgo de chocar contra las rocas. Tuvo que descender cuidadosamente, ya que no podía permitirse sufrir más lesiones. Escuchó los desgarradores gritos que llenaban el aire. Incluso en el agua, los niños lloraban y clamaban: “¡Mamá, te amo! Mamá”

Sentía una quemazón intensa en la mano. Me encontraba en el suelo, pero pensar en mi esposa, mis hijos y mis nietos, me dio fuerza para seguir corriendo, así que me lancé al mar.

Joseph Texeira, sobreviviente del incendio en Maui (sentado en el centro), sufrió quemaduras en las manos mientras escapaba de las llamas. Estuvo horas en el mar, tratando de sobrevivir. Sentada a la derecha está su esposa, Brenda. Foto/Ting Fan

La isla hawaiana de Maui enfrenta una de las tragedias más devastadoras de su historia. Los voraces incendios forestales causaron graves daños, destruyendo monumentos de la ciudad de Lahaina, dejando a cientos de personas sin hogar y a miles sin electricidad. Más de 2,200 estructuras resultaron dañadas o destruidas, el 96% de ellas eran residenciales. El incendio ha cobrado la vida de más de 100 personas y se encuentra actualmente registrado como el quinto incendio forestal más mortífero en la historia de Estados Unidos. Esta tragedia dejará una marca en el corazón de todos los residentes de la hermosa isla, quienes ahora enfrentan grandes pérdidas e incertidumbres.

Los voluntarios de Tzu Chi a nivel nacional se han movilizado con rapidez ante esta emergencia colaborando activamente con la Cruz Roja Americana, el Ejército de Salvación y organizaciones locales para brindar asistencia inmediata. Además, han planificado la distribución de tarjetas de débito prepagadas para respaldar a aquellos que han sido más afectados por esta tragedia.

Los fondos distribuidos pueden ser utilizados para necesidades esenciales como alimentos, ropa, gasolina, medicamentos, pañales, alojamiento y más. Además del apoyo económico, Tzu Chi también brinda el tan necesario consuelo espiritual y emocional a los sobrevivientes, asegurándoles que no están solos. A través de múltiples operaciones de ayuda, los voluntarios han llevado el amor, el alivio y la compasión del mundo a quienes más lo necesitan.

Voluntarios de Tzu Chi están listos para realizar acciones compasivas por los afectados en Lahaina. Foto/Dan Ferrara

La campaña nacional de recaudación de fondos ‘Ayuda en Maui’ brinda ayuda a los sobrevivientes. Gracias a la increíble generosidad de un donante anónimo, los esfuerzos de recaudación de fondos que se realizaron durante el mes de septiembre de 2023 fueron duplicados hasta 1 millón de dólares, multiplicando el amor y el apoyo.

Respondiendo ágilmente ante los destructivos incendios forestales en la isla hawaiana de Maui, los voluntarios de Tzu Chi salen a las calles para aumentar la conciencia y recaudar fondos. Foto/Edgar Wu

El 13 de agosto de 2023, Tzu Chi lanzó una campaña de recaudación de fondos en las calles del barrio chino de Honolulu para llamar a las comunidades a brindar apoyo. El miércoles 16 de agosto de 2023, los voluntarios de Tzu Chi de Hawái viajaron a Maui para conocer las operaciones de ayuda en curso llevadas a cabo por la Cruz Roja Americana y el Ejército de Salvación, y han comenzado a sincronizar esfuerzos. 

Una de las voluntarias locales de Tzu Chi Hawái fue Shiulina Wu, quien, junto con otros voluntarios, voló desde Oahu para ayudar a la comunidad. A pesar de que Shiulina visita Maui con regularidad, este viaje fue diferente debido a la tragedia y al dolor de las muchas historias que escuchó.

Vengo a Maui con frecuencia, pero hoy fue un viaje muy diferente. Cuando aterrizamos tuvimos una sensación pesada porque sabíamos que la isla estaba sufriendo.

Días después de los incendios, los voluntarios llegaron para brindar ayuda, lo que reconfortó a los afectados y les dio esperanza en esos momentos difíciles. Foto/Dan Ferrara

Casi 20 días después del inicio de los incendios, los residentes luchaban por encontrar consuelo. En la ciudad de Lahaina, manos solidarias se ofrecían desde toda la comunidad, todo mientras procesaban su propio dolor. Laura Baxter, residente local que regresó de sus vacaciones justo después de que comenzaran los incendios, compartió su historia con los voluntarios de Tzu Chi:

Estábamos de vacaciones en Oregón. Estaba con mi hija y, tan pronto como pudimos, terminamos todo lo que estábamos haciendo allá y vinimos. Y, ya sabes, desde el momento en que tocamos tierra, historias llenas de dolor inundaron nuestras conversaciones y no podíamos dejar de llorar.

Nadie anticipaba que el huracán de categoría 4, Dora, ubicado a unas 700 millas de Hawái, desencadenaría los incendios que cobrarían tantas vidas en la historia de los Estados Unidos. Los vientos extremos que alcanzaron velocidades de hasta 145 millas por hora, no resultaron en gigantescas olas ni inundaciones, sino que llevaron consigo vientos secos extremos hacia Lahaina, una hermosa zona costera en el noroeste de la isla. Los esporádicos incendios originados por cables eléctricos derribados se propagaron velozmente en todas direcciones.

Una de las beneficiarias de Tzu Chi fue Tracy Brojakowski, una maestra que después del desastre siguió preocupada por sus alumnos. Tracy compartió con los voluntarios que tan pronto como se desencadenó el incendio y el día se volvió oscuro como la noche, tomó una decisión rápida y agarró sus documentos. Preocupada de que su automóvil se incendiara bajo las constantes bolas de fuego, condujo hacia el norte en busca de un refugio seguro.

El 8 de agosto, no recibimos ninguna orden de evacuación. La única información que obtuvimos fue de la escuela, que cerró debido a cortes de energía causados por los fuertes vientos.

“Habíamos logrado contener el fuego en esos días, pero inesperadamente, la tarde del 8 de agosto, el viento se volvió extremadamente fuerte arrastrando todo. Quince minutos después, un vecino corrió hacia mi puerta y me dijo que tenía que irme inmediatamente. Miré afuera y la cerca de la iglesia ya estaba en llamas”, mencionó Tracy.

Rescate en medio del fuego

Mientras el incendio forestal se desataba en Lahaina, un grupo de voluntarios se movilizó rápidamente para llevar a cabo cuatro distribuciones de tarjetas de ayuda y suministros cada domingo desde el 27 de agosto hasta el 17 de septiembre, en Lahaina, Kihei, Wailuku y Kīpahulu. La primera distribución benefició a 281 familias, la segunda a 302, la tercera a 521 y la cuarta a 480 familias.

Para Joseph Texeira, que perdió su hogar y sus pertenencias en el incendio, la distribución de socorro de Tzu Chi fue una bendición. “Estoy muy agradecido por lo que Tzu Chi ha hecho por nosotros”, dijo. “Hoy he venido a recoger una tarjeta de regalo de $300 y una tarjeta de regalo de $100 para mi esposa”. El apoyo económico de Tzu Chi los ayudará a comprar alimentos y otras cosas que necesitan. 

Asimismo, Peachie Garcia, otra beneficiaria de la ayuda, no pudo contener su emoción y gratitud. Ella había pasado noches en el frío, esperando recibir una manta que la abrigara. Al día siguiente, Tzu Chi llegó con ayuda.

Todos estamos muy agradecidos por tanto apoyo de nuestra comunidad. Es simplemente abrumador.

Además de las tarjetas de ayuda, Tzu Chi también distribuyó ropa, mantas, productos de higiene personal y otros artículos esenciales. Muchos damnificados se sintieron aliviados al recibir esta ayuda, ya que perdieron sus hogares y pertenencias en el incendio.

La distribución de socorro de Tzu Chi también contó con la ayuda de voluntarios locales, que se unieron para apoyar a sus vecinos en un momento de necesidad. Muchos de estos voluntarios compartieron historias de personas que habían perdido sus hogares y vivían en refugios temporales.

Es realmente conmovedor ver a la comunidad unirse y ayudarse mutuamente en tiempos de crisis. Muchas personas han perdido sus hogares y están sufriendo la pérdida de sus seres queridos. Estamos aquí para ofrecer apoyo y consuelo en la medida de lo posible.

Una comunidad unida en la adversidad

La recaudación de fondos de Tzu Chi para ayudar a las víctimas de los incendios forestales en Maui se lleva a cabo en todo el país. En la imagen se pueden ver a voluntarios de Tzu Chi y miembros de la comunidad en Flushing, Nueva York. Foto/Hui Liu

El incendio forestal en Lahaina no solo causó daños materiales significativos, sino que también dejó una profunda huella emocional en la comunidad. A medida que la comunidad se recupera de esta tragedia, se ha unido en solidaridad y apoyo mutuo. Tracy Brojakowski, la maestra que tuvo que evacuar su hogar durante el incendio, dijo: “Esta experiencia ha sido increíblemente difícil para todos nosotros, pero también nos ha unido de una manera que nunca hubiera imaginado. La gente ha estado ayudándose mutuamente, compartiendo sus recursos y ofreciendo consuelo en momentos de necesidad.”

La generosidad y el espíritu de servicio de Tzu Chi han dejado una impresión duradera en la comunidad.

Kokua suave como las olas

En hawaiano, “kokua” significa “ayuda” o “asistencia”. En momentos de necesidad, la comunidad de Hawái demuestra una profunda cultura de kokua, en la que las personas se ayudan mutuamente y se apoyan en momentos de crisis. La distribución de socorro de Tzu Chi en Lahaina es un ejemplo de este espíritu de kokua en acción.

El incendio forestal en Lahaina afectó profundamente a la comunidad, pero también sacó a relucir lo mejor de las personas. Los voluntarios de Tzu Chi, junto con la comunidad local, se unieron para brindar apoyo y asistencia a aquellos que más lo necesitaban. En la primera fase de ayuda más de 1,500 familias fueron beneficiadas. En medio de la adversidad, surgieron historias de resiliencia, generosidad y solidaridad.

Tzu Chi continuará trabajando en estrecha colaboración con la comunidad de Hawái para ayudar en la recuperación a largo plazo de aquellos afectados por el incendio forestal. A través de sus programas de atención médica gratuita, apoyo emocional y asistencia, Tzu Chi seguirá brindando kokua a la comunidad de Hawái en su proceso de fortalecimiento.

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