Durante 30 años, la misión médica de Tzu Chi en los Estados Unidos ha convocado a voluntarios profesionales y no profesionales para proporcionar servicios de atención médica en áreas empobrecidas de todo el país y en países vecinos de América Central y del Sur. Los médicos y voluntarios de Tzu Chi USA han viajado por todas partes, cultivando la bondad en las comunidades y llevando medicina y atención a áreas desfavorecidas.

“Bondad” significa dar alegría, “compasión” significa aliviar el sufrimiento, y Tzu Chi es el camino del Dharma que guía a todos los seres a hacer el bien. Agradecemos al equipo médico de Tzu Chi en los Estados Unidos por su firmeza y compromiso durante los últimos 30 años, ya que hemos visto las figuras compasivas de los médicos y voluntarios de Tzu Chi en los rincones oscuros del sufrimiento y en escenas de desastres en grandes ciudades y en todo Estados Unidos.

En 1992, Stephen Huang expresó el deseo de promover la visión de preservar la salud en las comunidades de los Estados Unidos. Él invitó al Dr. Chinlon Lin a visitar personalmente la clínica médica gratuita establecida y dirigida por Share Our Selves, una organización sin fines de lucro centrada en proporcionar servicios médicos gratuitos para las personas sin hogar en el sur de California. Posteriormente, después de observar, investigar y evaluar la posibilidad de que Tzu Chi estableciera un centro de clínicas gratuitas, Lin dio una respuesta afirmativa. Huang partió de inmediato hacia Taiwán para informar.

En ese momento, les dije a los voluntarios de Tzu Chi que mantuvieran un principio: “Obtengan lo que necesiten localmente, confíen en ustedes mismos”. Estados Unidos está en una arena global, y debe ser estable y arraigado para que la semilla de Bodhi tenga una vida ilimitada. ¡En caso de cualquier desastre internacional, los voluntarios de Tzu Chi USA también deben cargar con la responsabilidad de salvar a las personas del sufrimiento!

Me alegra ver que los voluntarios de Tzu Chi en los Estados Unidos están dando pasos prácticos y esparciendo las semillas del amor por todo el país. Es conmovedor que la Clínica Gratuita Budista Tzu Chi, establecida hace 30 años en Alhambra, California, haya logrado ser autosuficiente. En esa área, hay muchos inmigrantes indocumentados, algunos de los cuales viven en la calle. Los voluntarios no podían soportar verlos sufrir. Por eso, montaron un baño en la clínica gratuita y prepararon varios juegos de ropa limpia para que las personas sin hogar pudieran tomar un baño caliente y cambiarse a ropa fresca antes de ver a un médico. La consideración y el respeto de los voluntarios estadounidenses hacia las personas han sido verdaderamente impresionantes.

Hoy en día, la clínica gratuita en Alhambra, (ahora el Centro de Salud Budista Tzu Chi — uno de los tres Centros de Salud Federalmente Calificado Similar en el sur de California), atiende a casi 10,000 pacientes anualmente. Los domingos y días festivos, el equipo médico viaja a áreas remotas para proporcionar vacunas, análisis de sangre, atención dental y visual, educación para la salud y otros servicios, protegiendo la salud de las comunidades con amor y perseverancia.

En una tierra tan vasta como los Estados Unidos, es gratificante saber que ya existen 24 capítulos locales de TIMA, que reclutan profesionales y voluntarios para seguir el Camino del Bodhisattva. El equipo médico de Estados Unidos también ha invertido esfuerzos significativos en lanzar Clínicas Móviles Tzu Chi; estos vehículos especializados son como clínicas gratuitas sobre ruedas, equipadas con instalaciones que cumplen con las especificaciones generales de una clínica y permiten cirugías menores. Por lo tanto, Tzu Chi USA puede extender sus servicios de atención médica a muchos lugares que los necesitan. El equipo médico esperaba brindar visitas en la comunidad bajo la premisa de “Si los pacientes no pueden venir a nosotros, iremos a ellos”, ¡y lo lograron!

Los voluntarios de Tzu Chi USA ayudan en los Estados Unidos y también viajan a países como Honduras, la República Dominicana, Bolivia, Guatemala y Perú para brindar atención médica; ellos ejemplifican la verdadera humanidad. Después del terremoto en Haití, TIMA realizó una clínica gratuita de 100 días mientras hacía todo lo posible para fomentar las semillas médicas locales. En 2012, había pacientes en el hospital central de Haití que sufrían de trastornos nutricionales. Afortunadamente, los miembros locales de TIMA transmitieron de inmediato el mensaje a los voluntarios haitianos. A pesar de la pobreza y la falta de suministros, estos voluntarios se las arreglaron para proporcionar alimentos nutritivos a los pacientes como frijoles mezclados con arroz. Esta energía de amor, heredada de TIMA USA, se ha estado propagando.

Una de las principales razones por las que Buda vino a la Tierra fue transmitir el Dharma a las personas. Los voluntarios de Tzu Chi han jurado practicar el Camino del Bodhisattva y convertirse en un arroyo claro en el mundo turbio. Mientras celebramos el trigésimo aniversario de la misión médica de Tzu Chi en los Estados Unidos, he sido testigo de todas sus acciones al llevar a cabo el Camino del Bodhisattva. En esta ocasión cálida y hermosa, espero sinceramente que todos abran su sabiduría, se mantengan firmes en nuestra intención de asumir la misión de purificar los corazones de las personas y crear la paz en la sociedad, y aspiren a ser “el maestro no invitado” de todos los seres; “Mantener el compromiso de seguir el camino es el gran reto”.

Espero que todos puedan alinear su cuerpo y mente con el eje del Dharma de Jing Si sin prejuicios, para así poder ser como círculos concéntricos tridimensionales con la misma raíz central. Espero que tomen medidas y promuevan la Escuela de Budismo Tzu Chi para que todos, sin importar dónde estén, puedan unir sus corazones y trabajar arduamente para cultivar un campo de bendiciones. Que el Dharma y Tzu Chi trasciendan el espacio y el tiempo para arraigarse profundamente entre las personas, con las raíces de la sabiduría sumergidas profundamente en el Gran Camino de Bodhi, para que un arroyo claro prevalezca sobre el arroyo turbio y convierta el sufrimiento en paz, convirtiendo la Tierra en una tierra pura lo antes posible. Les deseo sinceramente a todos felicidad, paz y buena fortuna, para que cada día esté lleno de alegría del Dharma y crecimiento en bendiciones y sabiduría.